Enviado por Gonzonet a través de Google Reader:
La falta de vitamina D sigue siendo una de las carencias nutricionales más importantes y relacionadas con un mayor riesgo de sufrir osteoporosis, así lo ha corroborado un reciente informe publicado por la Fundación Internacional de Osteoporosis (IOF) en la revista especializada Osteoporosis International.
Según se afirma, este problema está generalizado, y en aumento. Además, se hace especial hincapié en los riesgos que esta deficiencia conlleva, y en sus graves repercusiones para la salud en general, especialmente, en lo referido a la creciente tasa fracturas de los huesos.
Este informe de la IOF ha examinado los datos existentes sobre la vitamina D y su deficiencia, y sobre las causas y el alcance que esto tiene en seis regiones: Asia, Europa, América Latina, Oriente Medio y África, Amércia del Norte y Oceanía.
Recordemos que esta vitamina se produce principalmente en la piel tras la exposición a la luz del sol, aunque también, pero en menor medida, se obtiene de otras fuentes de nutrición. Su papel es principal en lo que relacionado con los niveles de calcio, mineral esencial para los huesos, su desarrollo y fortaleza. La vitamina D también participa en otras funciones y ayuda a mantener en buenas condiciones los sistemas orgánicos.
Tener bajo nivel de vitamina D puede llevar a un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis, con una consecuente mayor probabilidad de sufrir fracturas, sobre todo en la cadera, y, en casos graves, puede desencadenar en raquitismo, un problema en los niños que hace que sus huesos se ablanden y no sólo dé lugar a quebraduras sino también a deformidad esquelética.
Este informe concluye que los niveles de este nutriente presente en la gran mayoría de la población es bastante menor al recomendado. Además, recuerda otros factores de riesgo asociados con la osteoporosis más allá de la deficiencia de vitamina D: la edad avanzada, el sexo femenino (aunque también se da en hombres), la pigmentación de la piel más oscura, una menor exposición a la luz solar, los hábitos nutricionales, entre otros.
Así también, se mencionan otros factores relacionados con el estilo de vida actual, como son el aumento de la urbanización, donde las personas suelen vivir más alejadas del "día", y vivir y trabajar bajo techo, y alguans prácticas culturales relacionadas.
Finalemente, este trabajo pide que los planes de acción se aborden de manera nacional, y que se aliente a la gente a tomar sol (de forma conciente y controlada, claro) y se fomenta una mayor ingesta de alimentos fortificados con vitamina D.
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